La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, advierte de que EEUU tiene dinero para hacer frente a sus compromisos de pago hasta el 18 de octubre

Janet Yellen, Secretaría del Tesoro de EEUU

J.J. Fdez-Figares (Link Securities) | El repentino repunte de los tipos de interés de los bonos, producto del aumento de las expectativas de inflación, provocó ayer una “huida” de los inversores de sus posiciones de riesgo, generando fuertes caídas en las bolsas europeas y estadounidenses. En unas cuantas sesiones los principales índices de estos mercados han cedido todas las ganancias acumuladas en lo que iba de 3T2021, con muchos de ellos entrando en pérdidas en el trimestre. Una vez más, septiembre cumple con las “expectativas”, convirtiéndose en un mes muy negativo para las bolsas. La caída de los precios de los bonos y el consiguiente repunte de sus rendimientos volvió ayer a penalizar mucho en bolsa, como ya lo había hecho el lunes, a los valores de crecimiento, especialmente a los tecnológicos y a los del sector de la biotecnología, cuyas valoraciones suelen ser más exigentes y se ven penalizadas por el aumento de la tasa de interés sin riesgo, que suele ser la del bono a 10 años, al ser ésta utilizada para el cálculo de la tasa a la que se descuentan los flujos de caja futuros que se espera generen estas compañías. 

Señalar, por otro lado, que detrás del repunte de las expectativas de inflación se encuentra la crisis energética “inducida políticamente”, que se inició en Europa continental y que se ha extendido ya al Reino Unido y a China. En este último país, además, y como señalábamos ayer los cortes energéticos que se están provocando en algunas regiones, algunos producto de las directrices establecidas por el gobierno para limitar el consumo energético y otros como consecuencia de la falta de gas y carbón, están afectando ya al 44% de las fábricas del país, lo que generará a su vez nuevos problemas en las cadenas de suministros globales y, por tanto, más presiones inflacionistas. Ante este escenario inflacionista -ayer el presidente de la Reserva Federal (Fed), Powell, reconoció ante el Comité Bancario del Senado que la alta inflación estaba durando más de lo esperado-, los inversores han comenzado a descontar que los bancos centrales es posible que se vean obligados a comenzar el proceso de retirada de estímulos monetarios antes de tiempo, con alzas de tipos incluidas. Es por ello que se han decantado por la venta de bonos, provocando el repentino repunte de las rentabilidades de los mismos, que ayer se situaron a su nivel más elevado en tres meses, proceso similar al que asistimos el pasado mes de mayo, que llevó al Nasdaq Composite, índice en el que los valores de crecimiento, especialmente los tecnológicos, tienen una elevada ponderación, a entrar en fase correctiva, al ceder entonces más del 10% desde su anterior máximo. De momento, la mayoría de los principales índices bursátiles europeos y estadounidenses han retrocedido casi un 5% de media. Está por ver si a sus actuales niveles vuelve a entrar dinero en el mercado, algo factible ante la falta de alternativas de inversión atractivas, o si las caídas van a más en el corto plazo. 

En este sentido, señalar que la caótica situación política por la que atraviesa EEUU, que, de no tomarse las medidas necesarias, concretamente la aprobación de un nuevo techo de deuda, llevarían al país a no poder hacer frente a sus compromisos de pago -ayer la secretaria del Tesoro, Yellen, advirtió a los Senadores que EEUU tiene dinero para ello hasta el 18 de octubre-, también está comenzando a pasar factura a las bolsas de este país, con los inversores mostrándose cada vez más preocupados por un tema que hace semanas veían imposible que pudiera deteriorarse tanto. Aunque los legisladores siguen jugando al “juego del gallina”, esperamos que eviten finalmente que una crisis política provoque una severa crisis económica. 

Hoy esperamos que las bolsas europeas abran al alza, intentando de esta forma estabilizarse tras los fuertes recortes que experimentaron ayer. La atención seguirá centrada en factores como i) la crisis de la promotora china Evergrande, que hoy afronta un nuevo vencimiento de una emisión en dólares por importe de $ 47,5 millones. Ayer se filtró que el Gobierno chino habría “animado” a algunas promotoras con participación estatal a comprar activos a Evergrande. Además, también se habla de la posible venta de activos por parte de la compañía para hacer liquidez de forma inmediata; y ii) las negociaciones en Washington para la aprobación de los programas de infraestructuras, el físico y el social y, sobre todo, de la ley que servirá para financiar a corto plazo al gobierno federal y de la que permitirá el aumento del límite de deuda. 

Como es habitual en momentos como el actual, durante toda la mañana de hoy serán los futuros de los índices bursátiles de Wall Street los que “marcarán el paso” a las bolsas europeas. Posteriormente, será la tendencia que adopten las bolsas estadounidenses las que determinen la tendencia de cierre en los mercados europeos. Por último, habrá que estar atentos a los rendimientos de los bonos que, de seguir repuntando, meterían más presión a la renta variable.