Lo más relevante para los mercados será ver hasta dónde llegan las sanciones que impone Occidente a Rusia

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Renta 4 | Los futuros apuntan a una apertura al alza en Europa (Eurostoxx 50 +2%), después de las fuertes caídas de ayer y tras la recuperación de Wall Street (S&P +2,5% y Nasdaq +3,5% desde el cierre europeo), con unos mercados que siguen evaluando el alcance del conflicto bélico en ciclo económico, inflación y políticas monetarias. 

Ayer vimos un fuerte incremento de la aversión al riesgo, con TIRes 10 años que llegaron a caer hasta -14 pb en Estados Unidos (1,86%) y -10 pb en Alemania (0,13%) ante la escalada de tensión en torno a Ucrania más intensa de lo inicialmente previsto, mientras que las bolsas europeas llegaban a acumular caídas superiores al 5%. Al final del día, las pérdidas en los índices se suavizaron (-3%/-4% en promedio) y las TIRes recuperaron parte de su caída, esta mañana en 1,96% y 0,17% respectivamente. 

Lo más relevante para los mercados es ver hasta dónde llegan las sanciones que impone Occidente a Rusia: por el momento, y aunque ayer se anunciaron nuevas sanciones de corte socioeconómico, no afectan a los dos temas más comprometidos, sector energético y sistema internacional de pagos Swift. La repercusión de las sanciones anunciadas hasta el momento no debería ser demasiado problemática para Rusia, con deuda externa en mínimos (25% PIB), elevado nivel de reservas (la deuda externa a corto plazo es menos del 10% de las reservas actuales en dólares), deuda pública muy baja (20% PIB), y un comercio que en los últimos años ha girado hacia China. Sin embargo, la evolución de las tensiones Rusia-Occidente será las que determine el grado de impacto en el ciclo económico global (a la baja) y en los niveles de inflación (al alza). Y, por derivada, la reacción de los bancos centrales, especialmente del BCE, en lo que respecta al ritmo de normalización de sus políticas monetarias, que se podría retrasar ante el incremento de incertidumbre (ayer Holzman, uno de los halcones del BCE, hasta ahora dispuesto a subir tipos antes de fin de año, se mostraba bastante más cauto ante el incierto impacto del conflicto bélico en el crecimiento europeo). Eso sí, sin perder de vista la intensificación de presiones inflacionistas en el más corto plazo (energía, alimentos), que complica la actuación de los bancos centrales. 

En este contexto, es previsible que persista una elevada volatilidad en los mercados que, no obstante, podría ofrecer interesantes oportunidades de compra de ser el alcance del conflicto limitado en términos de crecimiento e inflación. El Eurostoxx 50 ha llegado a acumular una caída cercana ya al 15%, similar a otros momentos de importante tensión geopolítica, y cotiza a unas valoraciones atractivas (ya por debajo de su media histórica), siempre y cuando se mantenga el buen tono del ciclo económico y con él de los resultados empresariales. Los shocks geopolíticos no suelen dar lugar a mercados bajistas siempre y cuando no deriven en una recesión. 

Hoy la principal referencia macroeconómica será el dato del deflactor del consumo privado subyacente en EEUU, la medida de inflación preferida de la Fed, que en el mes de enero podría seguir repuntando hasta +5,1%e (vs +4,9% anterior). También conoceremos datos de inflación en Francia (IPC febrero+3,3%e i.a. vs +2,9% anterior) y España (precios de producción de enero, +36% i.a. anterior). Por su parte, los datos de confianza de febrero en la Eurozona podrían mejorar ligeramente, si bien no recogerán aún el incremento de tensiones geopolíticas, mientras que el PIB final 4T21 de Alemania confirmará la caída del preliminar (-0,7%). 

Continuaremos asimismo con la batería de resultados empresariales, en España con las cifras de Amadeus, CAF, Cellnex, Deoleo, FAES Farma y Metrovacesa, así como la presentación del plan estratégico de Viscofan.