Los miembros del FOMC ya no esperan que la que la economía estadounidense entre en recesión

FED_julio_2023

Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | En una jornada en la que “la inflación” volvió a ser protagonista, los principales índices bursátiles europeos cerraron de forma mixta y sin grandes cambios, aunque lejos de sus niveles más altos del día, niveles alcanzados por la mañana, mientras que los índices de Wall Street lo hicieron con nuevos descensos, muy cerca de sus mínimos del día. Desde primera hora del día, tras la publicación en el Reino Unido de los datos del IPC de julio, la inflación volvió a situarse como el principal factor de preocupación para los inversores. Así, y aunque el comportamiento de la inflación en julio en el Reino Unido continuó yendo en la buena dirección, el descenso de la misma sigue siendo insuficiente para que el Banco de Inglaterra (BoE) dé por finalizado su proceso de alzas de tipos, sobre todo teniendo en cuenta que tanto la inflación subyacente como uno de sus principales componentes, la inflación de los servicios, siguen mostrándose reticentes a descender. Esperamos todavía una o dos alzas más de las tasas oficiales en el país antes de que el BoE opte por parar, aunque ello va a depender en gran medida de lo que haga la inflación en los próximos meses. Las lecturas fueron en un principio mal recibidas por los mercados de bonos y acciones europeos, aunque ambos se giraron al alza a media mañana.

Por la tarde, la dubitativa apertura de las bolsas estadounidenses penalizó el comportamiento de las bolsas europeas, cuyos índices cedieron gran parte de lo ganado por la mañana, entrando algunos de ellos en negativo al cierre de la jornada. En Wall Street la atención de los inversores se giró hacia la publicación a última hora de la tarde de las actas de la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed, el FOMC, celebrada a finales de julio. Cabe recordar que en dicha reunión la Fed subió sus tasas de interés de referencia en 25 puntos básicos, hasta el intervalo del 5,25% – 5,50%, su nivel más elevado en 22 años. Las actas realmente no aportaron nada nuevo, aunque sí vinieron a ratificar que la mayoría de los miembros del FOMC continúan viendo riesgos significativos al alza para la inflación, lo que podría requerir un mayor endurecimiento de la política monetaria. Sin embargo, también se observó un alto grado de incertidumbre con respecto a los efectos acumulativos en la economía del pasado endurecimiento de la política monetaria. Por último, y este es un punto muy relevante, los miembros del FOMC señalaron que ya no esperan que la que la economía estadounidense entre en recesión, escenario que “la bondad” de las últimas cifras macroeconómicas que se vienen publicando en el país -ayer mismo las de inicios de vivienda y producción industrial de julio- parece ratificar.

No obstante, esta renovada “fortaleza” de la economía estadounidense sí puede tener impacto en la política monetaria de la Fed, no tanto en lo que hace referencia a nuevas alzas de tipos -tras la publicación de las mencionadas actas, los futuros siguieron mostrando una probabilidad del 88,5% de que la Fed no subirá sus tasas en la reunión de septiembre, probabilidad que repuntó sólo ligeramente de cara a la reunión de noviembre-, como en relación al tiempo que los mantendrá a estos niveles. Esta posibilidad, que la Fed tenga que mantener más tiempo de lo esperado sus tasas de interés de referencia a niveles elevados y restrictivos para lograr doblegar a la inflación fue lo que “no gustó” ayer a los inversores en Wall Street, que aceleraron las ventas, tanto de bonos como de acciones, en las últimas horas de la sesión.

Hoy, y en una sesión que presenta una agenda macroeconómica bastante liviana, en la que únicamente destaca la publicación esta tarde en Estados Unidos de las peticiones iniciales de subsidios de desempleo semanales, cifra que es una buena aproximación al comportamiento del desempleo semanal en el país y que nos permitirán saber si continúa la fortaleza en el mercado laboral estadounidense, esperamos que las bolsas europeas abran la baja. No descartamos, sin embargo, que, a medida que avance la jornada, se produzcan intentos en las mismas de revertir parte de los recientes descensos experimentados por estos mercados, algo que dependerá mucho del comportamiento que mantengan los futuros de los índices de Wall Street, primero, y estos índices una vez iniciada la sesión en este último mercado.