Europa se mantiene en territorio de contracción, pero en un nivel cercano a la estabilización

Fernando Marcos (Intermoney) | Ayer volvimos a asistir a lo que parece ya una rutina: jornada de transición, a la espera del BCE, las comparecencias de Powell y los datos de empleo americanos.

Desde Oriente y antes de la comparecencia ante la Asamblea Popular Nacional del primer ministro Li Quiang, el ejecutivo ha fijado el objetivo de crecimiento para el 2024 en el 5%, en línea con las expectativas. Fijó el objetivo de inflación en el 3% y la tasa de paro en 5,5%.

También prevé un déficit presupuestario del 3% de la producción económica y a efectos de mercados, lo esencial es que prevé emitir 1 billón de yuanes de bonos del tesoro especiales, no incluidos en el presupuesto.

Para muchos, entre ellos el FMI que pronostica un 4.6%, el objetivo de crecimiento es excesivo. La crisis inmobiliaria está lejos de estar superada, a lo que se une la deflación, el mayor endeudamiento y la enorme dependencia de la inversión estatal lo que pone un poco en duda la apuesta.

El congreso pretende servir para restaurar la confianza, impulsar la demanda interna y abandonar el terreno negativo de la inflación después de 5 meses seguidos y se espera que lo haga mediante anuncios de estímulos fiscales.

La inflación subyacente de Japón volvió a acelerarse a 2.6% en febrero por encima del objetivo 2.5% desde 1.8% previo, desaparecidos los subsidios a los carburantes. El camino para abandonar la senda de políticas ultralaxas parece más despejado, aunque como venimos mencionando estará condicionado a los aumentos salariales y si son suficientemente fuertes como para apuntalar el consumo. El foco estará en la reunión del 18 y 19 de marzo donde se tomará las decisiones sobre estímulos.

En consecuencia, la renta variable europea abría a la baja, siguiendo la estela de debilidad de las asiáticas, mostrándose más cautelosos que temerosos, a la espera de los índices de gestores de compras de la eurozona, Alemania, Francia y EE. UU.

Destacamos la batería de datos europeos comenzando con PMI compuesto italiano de febrero algo más bajo del esperado a 51,1 pero se anota subidas más rápidas de la actividad desde 50.7, aunque las presiones inflacionistas siguen elevadas. Euro zona PMI Servicios HCOB febrero alcanza 50.2 contra el 50. 0 y el PMI Compuesto HCOB llega a 49.2 frente al 48.9 previo y previsto. El crecimiento de servicios es lo que está tirando de la economía de la eurozona, en especial en España, en máximos en nueve meses y el Índice HCOB PMI de Actividad Comercial del Sector Servicios se mantuvo por encima del 50.0 por sexto mes consecutivo. Datos que pasarán sin pena ni gloria ante el factor disruptivo de la actualidad, plagada de prácticas corruptas y proposiciones de leyes que amparan actos de usurpación de funciones públicas, malversación, atentados contra la autoridad, prevaricación, desórdenes públicos y terrorismo. Vivir para ver. En todo caso, en general Europa se mantiene en territorio de contracción, pero en un nivel cercano a la estabilización. Parece que la desaceleración del sector manufacturero lastra el crecimiento.

Los datos proporcionan la evidencia de que los precios de venta de servicios se aceleran, impulsados por los costes salariales y nos devuelve: una aparente robustez del sector, en comparación con el resto de la actividad económica y que aún es pronto para pensar en que se produzcan debates sobre recortes en la reunión del 7 de marzo

Comportamiento desigual para el Reino Unido que publica PMI final de servicios peor, a 53. 8 frente a 54.3 previsto.

IPP anual en la zona euro de enero alcanza el -8.6% desde -10.7% anterior pero mayor de lo previsto -8.1%, mientras que el mensual repite a -0.9%.

En cuanto a la deuda soberana: misma tónica, encontramos flujos significativamente importantes de compras en el corto, pero para determinadas referencias y centrado en el tap de Alemania 54 y primarios corporativos.

El Tesoro Público ha colocado este martes 5.118 millones de euros en letras a seis y doce meses. En letras a seis meses, el Tesoro emitió 1.231,8 millones de euros. La rentabilidad marginal ofrecida ha sido de ese 3.715 %, superior al 3.688 % de febrero. Por otro lado, se han adjudicado otros 3.885,8 millones de euros en letras a doce meses a 3,516 %, frente al 3. 359 % previo.