Las cartas de Trump: buscando más la intimidación que una política arancelaria efectiva más agresiva

Donald Trump ha envíado 14 cartas a mandatarios de países de Asia y África

Intermoney | Al comienzo de la semana conocimos las cartas de Trump dirigidas a varias naciones, en las que
manifestaba su intención de imponer aranceles. Las cartas amenazan con tarifas arancelarias del 25% al 40% a partir del 1 de agosto, en comparación con tasas recíprocas que van del 11% al 50% a fecha del 9 de julio. En concreto, ha llamado la atención el aviso de tarifas del 25% a productos procedentes de Japón y Corea del Sur, aunque también detallando planes para aplicar aranceles a bienes provenientes de otros socios comerciales. Pero el foco estaba el continente asiático, puesto que de los 14 países que recibieron cartas con notificaciones arancelarias, nueve están en Asia y la falta de avances en las negociaciones con países de esta área donde EEUU tiene un importante déficit es algo que no están pasando por alto desde la Casa Blanca. Posteriormente,
Howard Lutnick, el secretario de Comercio, el afirmó que esperaba que se enviaran entre 15 y 20 cartas adicionales en los próximos dos días, mientras Trump destacaba sus amenazas a industrias específicas, incluidas las de medicamentos, semiconductores y metales, en concreto avisaba que “creo que la tarifa sobre el cobre la vamos a poner en 50%”.

Eso sí, se otorgaba a cada nación afectada tres semanas adicionales para alcanzar un acuerdo, hasta el 1 de agosto, aunque el martes Donald Trump quería dejar claro que no ofrecerá ninguna prórroga al nuevo plazo. Pero esto ya lo vimos, y no hace tanto tiempo. A pesar de haber insistido repetidamente en que no habría prórroga para la anterior fecha, la realidad es que han extendido efectivamente el plazo arancelario del 9 de julio al 1 de agosto y esto nos hace pensar, de nuevo, en que la postura del mandatario está buscando más la intimidación que una política arancelaria efectiva más agresiva. Un ejemplo interesante ha sido el del crudo venezolano. La
administración impuso un arancel del 25% a cualquier país que compre petróleo a Venezuela. A pesar de que China representó la mayor parte de las exportaciones venezolanas en mayo y junio, no ha recibido reprimenda ninguna.

Y respecto a los acuerdos bilaterales, apenas hemos visto movimientos significativos más allá de Reino Unido y Vietnam. El objetivo marcado de “90 acuerdos en 90 días” no ha tenido el mayor de los éxitos. Estas idas y venidas sí ponen de relieve que la política hasta el momento está siendo errática. Como hemos venido contando desde IM, los aranceles seguirán vigentes debido a la necesidad de financiar las rebajas fiscales. Sin embargo, la lógica apunta que tengan un carácter selectivo y estratégico. Aranceles en torno del 10% a nivel global y algunos sectores con niveles algo superiores es el escenario base que estamos cotizando. La estrategia de adoptar una postura más agresiva y luego recular o extender las prórrogas que estamos viendo podría ser una opción que tienen desde la Casa Blanca, pero evitar represalias por parte de los otros socios comerciales.