Mauro Valle (Generali AM) | La decisión de hoy del BCE es lo suficientemente equilibrada como para no modificar las expectativas sobre próximos recortes de tipos de interés. El BCE tiene margen para volver a recortar en la segunda mitad del año, ya que las políticas monetarias aún se percibirán como restrictivas. El debate gira en torno a las probabilidades de un tercer recorte en diciembre de 2024: el mercado está valorando en torno a un 50% la probabilidad de que se produzca, mientras que nuestro análisis indica tres recortes. La decisión dependerá de los próximos datos económicos, principalmente la inflación y la evolución de los salarios, como Lagarde volvió a afirmar durante la rueda de prensa. Se espera que el escenario económico europeo confirme la tendencia de recuperación tras la fase de estancamiento de los trimestres anteriores, pero no se percibe que sea lo suficientemente fuerte como para generar un riesgo de inflación.
En este escenario, seguimos teniendo una visión positiva de los tipos alemanes por encima de la zona del 2,5% y mantenemos nuestra exposición de larga duración. Para el próximo mes, los tipos subyacentes podrían moverse en el rango observado en los últimos meses, por lo que nos inclinamos por una postura más neutral si los tipos se sitúan por debajo del 2,4%. Pero no esperamos, durante la segunda mitad del año, un repunte sostenido de los tipos, si el escenario de inflación se desarrolla como esperamos. Somos optimistas en cuanto a los vencimientos a corto y medio plazo de la curva de rendimientos en euros, ya que la inversión de la curva de rendimientos es bastante significativa y no vemos condiciones para una nueva inversión en el futuro próximo. Seguimos siendo positivos con respecto a los países periféricos, ya que las operaciones de carry trade y la búsqueda de rendimientos seguirán impulsando las preferencias de los inversores, teniendo en cuenta que en el futuro los tipos del euro podrían ser más bajos.