Andrés Aragoneses (Singular Bank) | En la actual coyuntura marcada por la creciente incidencia de la variante delta del coronavirus, que aumenta la incertidumbre sobre la senda de recuperación económica en la segunda mitad del año (especialmente en Asia), los mercados de renta variable a nivel global han cotizado en términos generales a la baja en la última sesión de la semana.
La jornada ha comenzado con referencias negativas de los mercados bursátiles de la región Asia-Pacífico. En China, el Shanghai Composite ha caído un 0,71%, contrastando con sus ganancias de ayer tras confirmarse que la producción industrial y las ventas minoristas crecieron en junio más de lo proyectado por el consenso del mercado. No obstante, la evolución del PIB en el 2T confirmó la pérdida de dinamismo de la economía china, principalmente ante la recuperación retrasada de la demanda interna. Por su parte, hoy el Nikkei 225 japonés también ha cerrado en rojo (-0,98%), en una sesión en la que el Banco de Japón ha revisado a la baja sus previsiones de crecimiento económico del actual año fiscal a un 3,8% anual (vs. 4,0% anterior).
El predominio de la toma de beneficios se ha extendido a Europa y EEUU, que han profundizado sus caídas de ayer, si bien en las bolsas estadounidenses se registran pérdidas moderadas a cierre de la sesión europea tras conocerse el dato de las ventas minoristas de junio. En concreto, el comercio minorista creció un 0,6% respecto a mayo, revirtiendo parcialmente su significativo descenso de un 1,7% del mes anterior y superando ampliamente las previsiones del consenso del mercado. Una evolución apoyada en los fuertes estímulos fiscales, el aumento del ahorro y el elevado porcentaje de población inmunizada, que está provocando una rotación del consumo hacia los servicios. Excluyendo el sector de automóviles, las ventas minoristas aumentaron un 1,3% mensual, en un contexto en el que el comercio de vehículos y componentes se contrajo un 2% en junio ante los problemas en las cadenas de suministro y las limitaciones de inventarios derivadas de la escasez global de semiconductores.
En contraste, el indicador preliminar de sentimiento económico de la Universidad de Michigan ha mostrado que en la primera quincena de este mes la confianza de los consumidores estadounidenses ha caído a su menor nivel de los últimos cinco meses. El índice ha disminuido a 80,8 puntos en julio (frente a 85,5 puntos el mes anterior) principalmente por el fuerte deterioro de las condiciones de compra de productos de mayor coste ante las crecientes preocupaciones sobre el aumento de los precios. Todo ello en un entorno en el que la inflación de EEUU alcanzó un 5,4% anual en junio (vs. 5,0% en mayo), ampliando su diferencial con la registrada en la Eurozona. En este sentido, hoy Eurostat ha confirmado que el nivel de precios de la zona monetaria europea creció un 1,9% en junio, 0,1 pp menos que el mes anterior, manteniéndose por debajo del nuevo objetivo del BCE de un 2%.
La capitalización de los principales mercados bursátiles de la Eurozona ha caído entre un 0,2% y un 0,5% en la sesión de hoy, situándose en todos los casos por debajo de sus niveles de cierre del pasado viernes. El DAX 30 alemán ha liderado los descensos (-0,57%), en línea con la evolución del CAC 40 francés (-0,51%), mientras que el IBEX 35 español ha registrado una pérdida más moderada de un 0,24%, Fuera de la zona monetaria europea, el FTSE 100 británico ha mostrado mayor estabilidad (-0,06%).
En España, el IBEX 35 ha cerrado en negativo por cuarta sesión consecutiva, cayendo hasta la barrera de 8.500 puntos tras perder desde el pasado viernes un 3,1%. Con 8.506 puntos ha cerrado en su menor nivel en los últimos 3 meses (desde el 20 de abril). Entre sus componentes han destacado las caídas de ArcelorMittal (-3,54%) y Banco Sabadell (-4,04%), mientras que las revalorizaciones más significativas se han concentrado en Pharma Mar (+2,59%), Aena (+1,86%) y Meliá Hotels (+1,86%).
Por otro lado, a cierre de la sesión europea las bolsas de EEUU muestran caídas ligeramente más moderadas que las de la Eurozona, perdiendo el S&P 500 un 0,36% y el Nasdaq Composite un 0,19%.