J. Fdez-Figares (Link Securities) | Jornada de transición la de ayer en las bolsas europeas, con los inversores a la espera de conocer el resultado de las negociaciones para el Brexit, resultado que sigue mostrándose elusivo, y mirando de reojo a lo que pueda anunciar hoy el BCE en materia de política monetaria.
Aun así, la mayoría de los principales índices europeos lograron terminar la jornada con ligeros avances, aunque lejos de sus niveles más altos del día. Lo mismo ocurrió con la libra esterlina, que está ejerciendo en los últimos días como “termómetro” para determinar el estado de las conversaciones para el Brexit, que fue igualmente de más a menos durante la jornada, con los inversores mostrándose prudentes ante la reunión que iban a mantener por la noche en Bruselas el primer ministro británico, Johnson, y la presidenta de la Comisión Europea (CE), von der Leyen.
En relación a la mencionada reunión, señalar que las partes se mostraron incapaces de acercar posturas, por lo que se han dado de margen hasta el domingo para tomar una decisión en firme sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE). A pesar de que a los inversores les hubiera gustado que ayer se cerrara dicho acuerdo, el hecho de que las negociaciones continúen es una buena noticia, ya que existía el riesgo de que las mismas se rompieran definitivamente, dadas las diferencias que sigue habiendo entre las partes. En ese sentido, y tras su reunión con Johnson, von der Leyen, dijo en un comunicado que las dos partes estaban «muy separadas» y que los equipos negociadores reanudarían inmediatamente las conversaciones «para tratar de resolver estos temas esenciales». Por tanto, “el factor” Brexit seguirá condicionando el comportamiento de los mercados de valores europeos, al menos hasta el domingo, cuando se espera que, o bien se alcance un acuerdo para un Brexit “ordenado”, o bien se rompan definitivamente las negociaciones lo que llevará al Reino Unido a abandonar la UE sin acuerdo. Es evidente que la reacción de las bolsas de la región será muy distinta dependiendo de cuál sea el resultado final.
Por otro lado, y en el lado positivo de la balanza, señalar que ayer se supo que los Gobiernos de Polonia y Hungría habían llegado a un acuerdo con el Gobierno alemán para desbloquear el presupuesto y el plan de estímulo de la Unión Europea (UE). En principio, este acuerdo debería ser aprobado en la cumbre de líderes de la UE, que comienza hoy.
Por su parte, la sesión en Wall Street fue bastante distinta. En este mercado los inversores siguen muy pendientes de las negociaciones para la aprobación de un nuevo plan fiscal de estímulos, aunque ayer las noticias que se fueron conociendo sobre el avance de las mismas fueron algo confusas y, por momento, contradictorias. Todo parece indicar que será la propuesta bipartidista, elaborada por senadores demócratas y republicanos, la que conforme la base del nuevo programa. El mayor problema, sobre el que ambos partidos mantienen grandes diferencias, es el tema de la protección por responsabilidad civil de empresas, entidades y colegios que han operado durante la pandemia. De momento, ayer la Cámara de Representes aprobó una ley para financiar al gobierno Federal por una semana para dar tiempo a las negociaciones. Por tanto, no esperamos que haya una decisión definitiva al respecto hasta bien entrada la semana que viene, aunque somos positivos. Ayer, y ante la falta de avances sobre este tema, los inversores en Wall Street se decantaron por las tomas de beneficios, algo normal si tenemos en cuenta la racha de máximos históricos que han venido marcando los principales índices de este mercado en las últimas sesiones. Las ventas afectaron más a los valores de crecimiento, especialmente a los tecnológicos y a los de servicios de comunicación, con los conocidos como FAANGs (Facebook, Apple, Amazon, Netflix y Alphabet, matriz de Google) a la cabeza. En sentido contrario, los valores de corte cíclico como los de la energía, los industriales y los de materiales lograron cerrar la jornada al alza.
Hoy los inversores afrontarán una sesión intensa, con muchos frentes abiertos. No obstante, entendemos que la principal cita de los inversores en las plazas europeas será la reunión que mantendrá el Consejo de Gobierno del BCE, en la que hay puestas muchas esperanzas, esperanzas que vemos difícil que sean del todo satisfechas, dado el estrecho margen de maniobra que le resta a la institución en materia de política monetaria. Así, el mercado espera que el BCE incremente el importe de su fondo de emergencia para la pandemia, el conocido como PEPP, en unos 500.000 millones de euros y que aumente su vigencia en 6 o 12 meses. Además, se espera que mejore las condiciones de sus subastas de liquidez a largo plazo ilimitadas, los TLTRO, para intentar potenciar el crédito bancario en la región. Por último, el mercado espera algún “guiño” del Consejo de Gobierno al sector bancario, con analistas que apuestan porque el BCE retire su “consejo” a los bancos de no distribuir dividendos, algo que vemos complicado que ocurra dado el impacto que está ya teniendo la segunda ola de la pandemia en la economía de la región, lo que, a medio plazo, tendrá un impacto seguro en la morosidad del sector, impacto que a día de hoy es de muy difícil cuantificación. Por tanto, y en nuestra opinión, existe el riesgo de que el BCE no cumpla del todo con las expectativas de los mercados, lo que podría provocar caídas en las bolsas, al menos en el corto plazo.
Además, hoy los inversores estarán pendientes de conocer si la FDA estadounidense da el visto bueno a la vacuna contra el Covid-19 desarrollada por Pfizer y BioNTech, siguiendo de esta forma a los reguladores sanitarios del Reino Unido y de Canadá, que ya lo han hecho. De ser así, el proceso de vacunación a la población de mayor riesgo puede comenzar en Estados Unidos tan pronto como este fin de semana. A pesar de que parece que la vacuna no debe ser utilizada entre las personas con fuertes alergias, algo que es bastante común entre todo tipo de vacunas, esperamos que la FDA apruebe la vacuna, algo que se sabrá entre hoy y mañana.
Para empezar, esperamos que las bolsas europeas abran entre planas y ligeramente a la baja, con los inversores a la espera de lo que diga y haga el BCE.
