Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | En una nueva sesión de idas y vueltas, los principales índices bursátiles europeos cerraron ayer con importantes avances, aunque lejos de sus niveles más altos alcanzados por la mañana. El buen comportamiento de la renta variable europea se apoyó en el optimismo mostrado el pasado domingo por las delegaciones ucranianas y rusas, que negocian para alcanza un acuerdo de alto el fuego.

Ello animó a los inversores a asumir riesgos, mientras deshacían posiciones en los activos y sectores que habían venido comportándose mejor desde el comienzo de la invasión rusa de Ucrania. Así, los precios de los bonos descendieron con fuerza tanto en Europa como en Estados Unidos, lo que conllevó fuertes repuntes de sus rentabilidades –el rendimiento del bono del Tesoro estadounidense con vencimiento a 5 años superó el 2% por primera vez desde el mes de mayo de 2019–. Asimismo, los precios de muchas commodities cedieron con fuerza ayer, entre ellos el del oro (-1,2%) o el del paladio (-13,5%) y, especialmente, el del crudo, que en su variedad WTI estadounidense bajó el 5,7% y en su variedad Brent el 5,1%, aunque recuperó algo de terreno tras haber llegado a situarse el precio de la variedad WTI a mediados de sesión por debajo de los 100 dólares/barril. Cabe destacar que el fuerte descenso del precio del crudo no se debió únicamente a las expectativas de que Ucrania y Rusia alcancen un acuerdo de paz, sino que también estuvo muy ligado a las noticias que sobre nuevos confinamientos están llegando desde China, país en el que la política de “covid cero” parece estar haciendo aguas. Ello ha llevado a las autoridades a confinar algunas ciudades, incluso regiones enteras, algunas de las cuales son muy industriales, generando dudas entre los inversores sobre el impacto que ello podría tener en las cadenas de suministros y en el crecimiento económico global de no poder controlar el país esta nueva ola de la pandemia. En este sentido, destacar que en China las cifras de tráfico automovilístico han descendido drásticamente, hasta niveles no vistos desde marzo de 2020, en plena primera ola de la pandemia. 

Así, y en un entorno de tipos al alza y de precios del crudo a la baja, en las principales plazas europeas ayer fueron algunos de los sectores que han sido recientemente más castigados por los inversores los que mejor comportamiento tuvieron, destacando entre ellos el bancario, el asegurador y el del automóvil. En sentido contrario, los valores de crecimiento, entre ellos los tecnológicos y los relacionados con las energías renovables, éstos también penalizados por el descenso del precio del crudo, fueron los que peor se comportaron. 

La sesión en Wall Street, por su parte, fue bastante diferente, ya que en este mercado el fuerte repunte del los rendimientos de los bonos y las noticias sobre el cierre de algunas plantas de producción en China, como consecuencia de los confinamientos, penalizaron el comportamiento de los valores de crecimiento, especialmente de los grandes valores tecnológicos, como fue el caso de Apple (-2,7% durante la sesión), lo que terminó por lastrar la evolución de los principales índices, especialmente el del S&P 500 y el del Nasdaq Composite, índice éste que entró ayer en mercado bajista por primera vez desde marzo de 2020, al haber cedido más del 20% desde su último máximo, alcanzado a mediados de noviembre de 2021. En este mercado el sector de la energía también tuvo ayer un muy negativo comportamiento, arrastrado por la fuerte caída de los precios del crudo y por las tomas de beneficios por parte de algunos inversores. 

Hoy esperamos que el mal comportamiento de ayer de Wall Street y los fuertes descensos que han experimentado esta madrugada la mayoría de las bolsas asiáticas, especialmente las chinas, provoquen una apertura a la baja de las bolsas europeas. Además, el hecho de que las negociaciones de paz entre Ucrania y Rusia se hayan aplazado hasta hoy sin aparentes avances, en lo que ha sido calificado por el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, de “pausa técnica”, creemos que, al menos por el momento, enfriará algo el ánimo de los inversores. Únicamente el nuevo fuerte descenso que está experimentando el precio del crudo esta madrugada puede catalogarse como bueno para la renta variable europea, aunque el motivo por el cual está cayendo el precio de esta materia prima: el riesgo de que la demanda se vea afectada por la menor actividad en China, producto de los confinamientos, no sea el ideal. 

Por lo demás, comentar que en la agenda macroeconómica del día destaca la publicación en Alemania de los índices ZEW, que miden el sentimiento que sobre la economía alemana tienen los grandes inversores y analistas, índices que se espera que hayan experimentado un fuerte descenso en el mes de marzo en comparación con sus niveles de febrero. Ya por la tarde, y en Estados Unidos, se publicará el índice de precios de la producción (IPP) de febrero, que se espera vuelva a subir con fuerza tanto en términos mensuales como en tasa interanual, así como el índice manufacturero de Nueva York del mes de marzo, the Empire State Index, para el que los analistas han proyectado una ligera mejoría. Por lo demás, comentar que hoy comienza la reunión de dos días del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) del banco central estadounidense, comité que se espera que mañana anuncie la primera alza de los tipos de interés oficiales en el país desde el año 2018.