Hay cierto “temor” entre los inversores de que Powell aproveche su intervención de hoy para “enfriar algo los ánimos” de los mercados de bonos

Jay Powell, presidente de la Fed

J. J. Fdez- Figares (Link Securities) | En una sesión de reducida actividad, con muchos inversores manteniéndose a la expectativa, los principales índices bursátiles europeos y estadounidenses cerraron ayer de forma mixta y sin grandes variaciones. Las “buenas noticias” en el ámbito macroeconómico que se dieron a conocer ayer y las expectativas de que la autoridades chinas, tras las protestas del fin de semana, opten por agilizar el proceso de reapertura del país, no fueron suficientes para animar a unos inversores que, tras el fuerte rally experimentado por las bolsas occidentales en el mes de noviembre, parece que han optado por hacer una pausa, a la espera de conocer los próximos movimientos de los principales bancos centrales, cuyos Comités de Política Monetaria se reunirán a mediados de diciembre. 

Hasta entonces, los inversores seguirán haciendo cábalas sobre cuáles serán los próximos movimientos de estas instituciones en materia de política monetaria. Es por ello que las cifras macroeconómicas que se publicarán hasta las mencionadas reuniones serán escrutadas en profundidad por los distintos agentes de los mercados. Así, ayer el hecho de que la inflación moderase su ritmo de crecimiento en el mes de noviembre en España y en Alemania, algo que es una buena noticia, fue bien recogida por los mercados de bonos, aunque no tanto por los de renta variable. Quizá el hecho de que en España la inflación subyacente, que es la más difícil de doblegar, haya seguido subiendo en el mes de noviembre y que, en Alemania, a pesar de la ligera mejoría, la tasa de crecimiento interanual del IPC armonizado (IPCA) siga por encima del 11% fueran los motivos por los que no se recibieron las cifras tan positivamente como podría esperarse. Además, ayer la Comisión Europea (CE) publicó sus índices que miden la confianza económica en la región del euro, así como su índice de confianza de los consumidores, todos ellos correspondientes al mes de noviembre. En ambos casos las lecturas fueron mejores que las del mes precedente, algo positivo, aunque bien es cierto que los índices se mantienen a niveles muy bajos en términos relativos históricos, por lo que tampoco sirvieron para animar a los inversores. Tampoco lo hizo demasiado el hecho de que las autoridades chinas hayan reaccionado de forma moderada a las manifestaciones de la población contra su política de “Covid-cero” -todo apunta a que están predispuestas a comenzar a poner en marcha el proceso de reapertura de la economía-, excluyendo a los valores con mayor exposición al mercado chino, especialmente los relacionados con las materias primas minerales y los del sector del petróleo, que ayer sí recogieron con alzas estas noticias.  

En Wall Street los factores enumerados fueron también obviados por los inversores, que ayer optaron por la prudencia, en una sesión de muy escasa actividad, a la espera de lo que hoy pueda decir el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, en la conferencia que dará a las 19:30 horas (CET) en el Brookings Institution, conferencia en la que hablará sobre el estado de la economía estadounidense y su mercado laboral, y que muchos analistas ven como un anticipo de lo que pueda “decir y hacer” la Fed cuando se reúna su Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) los días 13 y 14 de diciembre. Es más, hay cierto “temor” entre los inversores de que Powell aproveche su intervención para “enfriar algo los ánimos” de unos mercados, especialmente los de bonos, que, con sus alzas y, por consiguiente, con la relajación de sus rendimientos, están jugando en contra de los intereses del banco central estadounidense a la hora de restringir las condiciones financieras en el país. De ser así, y mostrarse Powell en su discurso más agresivo en materia de política monetaria de lo que vienen descontando los inversores, podría provocar ventas tanto en los mercados de bonos como en los de acciones. 

Pero antes, los inversores deberán hoy procesar una intensa batería de cifras macroeconómicas, empezando por los publicados esta madrugada en China, que apuntan a una mayor desaceleración del crecimiento económico en el país asiático en el mes de noviembre. Así, tanto el índice adelantado de actividad del sector manufacturero como el de servicios, los PMIs oficiales, han mostrado que en el citado mes el ritmo de contracción intermensual de la actividad ha ido a más, superando incluso lo anticipado por los analistas. Posteriormente, y en la Eurozona, los inversores estarán muy pendientes de la publicación en Francia, Italia y la Eurozona en su conjunto de las lecturas preliminares de los IPCs de noviembre con la esperanza que, al igual que ocurrió ayer con las lecturas de este indicador de precios en España y Alemania, muestren una ligera moderación en su ritmo de crecimiento, moderación que muchos quieren ver como la confirmación de que esta variable ha tocado ya el techo del ciclo en la región. Ya por la tarde, y en EEUU, se darán a conocer, entre otros, varios indicadores de elevada relevancia tales como: i) las cifras de empleo privado de noviembre que elabora la procesadora de nóminas ADP; ii) la segunda lectura del PIB estadounidense del 3T2022; y, iii) las cifras de empleos ofertados que elabora el Departamento de Trabajo con periodicidad mensual. Todas estas cifras serán la antesala de las de empleo no agrícola que se publicarán en el país el viernes, cifras que consideramos claves para que la Fed pueda valorar el estado real del mercado laboral estadounidense. 

Para empezar, esperamos que las bolsas europeas abran hoy al alza, aunque sin mucha convicción, siendo factible que, a medida que avance el día los inversores opten por realizar algunos beneficios, aprovechando para ello las fuertes alzas que han experimentado muchos valores y los índices en el mes de noviembre. Entendemos, además, que la intervención de Powell mantendrá a muchos inversores a la expectativa, al margen de los mercados, lo que se dejará notar en la actividad, que esperamos sea más reducida de lo habitual.