La CE descarta una recesión para la Eurozona, incluso si se interrumpe el suministro de energía procedente de Rusia, pero los “riesgos siguen siendo a la baja”

Economía Eurozona

J.J. Fdez- Figares (Link Securities) | Tras el fuerte repunte que experimentaron la última sesión de la semana pasada los principales índices bursátiles europeos y estadounidenses, la constatación de que la economía de China continúa debilitándose enfrió ayer algo los ánimos de los inversores, lo que condicionó desde primera hora del día el comportamiento de la renta variable occidental. Así, y en una sesión de escasa actividad, los principales índices de estos mercados cerraron con ligeros descensos, con excepciones como las del Ibex-35 (+0,19%) o las del FTSE 100 británico (+0,63%) y el Dow Jones estadounidense (+0,08%), que lo hicieron con ligeros avances, los dos últimos apoyados en el buen comportamiento de los grandes valores del sector de la energía y de las materias primas minerales, que fueron ayer los que mejor se comportaron. En sentido contrario, los valores catalogados como de crecimiento, especialmente los tecnológicos, fueron nuevamente castigados por los inversores, convirtiéndose en un lastre para los índices. 

Como ya señalamos ayer en nuestro comentario, las cifras de ventas minoristas, producción industrial, inversión en capital fijo e, incluso, desempleo, publicadas en China, correspondientes al mes de abril, y que estuvieron todas ellas por debajo de lo esperado por el consenso de analistas, apuntaron a una importante desaceleración del crecimiento económico en el país asiático, producto del impacto que en esta economía comienzan a tener ya los confinamientos implementados en muchas grandes ciudades y en algunas regiones para combatir la nueva ola de la pandemia que afecta al país. El principal problema de la política “nada realista” de “Covid-cero” que sigue adoptando el Gobierno chino es que no parece que pueda tener fin, ya que el virus se está convirtiendo en una enfermedad endémica con la que habrá que aprender a convivir. Además, el daño económico de esta estrategia es muy elevado, algo que, por mucho que intenten disfrazarlo “oficialmente”, va a hacer prácticamente imposible alcanzar los objetivos de crecimiento establecidos para el ejercicio por el Ejecutivo chino. De cara al resto del mundo, además de los nuevos problemas que está provocando esta política en las cadenas de suministro de muchos productos, factor de claros tintes inflacionistas, el hecho de que China “se pare” va a tener un impacto muy negativo en el crecimiento económico global, crecimiento que ya se estaba ralentizando como consecuencia de la alta inflación y del impacto de la guerra de Ucrania, sanciones incluidas. 

En este mismo sentido, cabe destacar, además, que ayer la Comisión Europea (CE) adelantó su nuevo cuadro macroeconómico para la Eurozona, en el que revisó a la baja sus expectativas de crecimiento y al alza las de inflación para todos los países de la región. Si bien, la CE descarta la entrada de la Eurozona en recesión, incluso en un escenario en el que se lleguen a interrumpir totalmente los flujos de energía procedentes de Rusia, los “riesgos para estas economías siguen siendo claramente a la baja”. 

Por último, cabe destacar que ayer la publicación en EEUU por la tarde del índice de manufacturas de Nueva York, the Empire State Index, que se situó en mayo por sorpresa a su nivel más bajo desde principios de la pandemia, indicando una sensible contracción de la actividad en el sector con relación a abril, también hizo saltar algunas alarmas entre los inversores.  

Como venimos repitiendo desde hace tiempo, el principal temor de los inversores en estos momentos es que los bancos centrales no sean capaces de controlar la inflación sin provocar una “aterrizaje brusco” de las grandes economías desarrolladas, economías cuyo crecimiento viene desde hace meses desacelerándose y que, todo apunta, lo seguirá haciendo en el corto/medio plazo. En ese sentido, hoy los inversores podrán analizar lo que diga al respecto el presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, que intervendrá a última hora de esta tarde en un evento organizado por The Wall Street Journal. Si bien no esperamos grandes sorpresas, sí creemos que Powell intentará calmar algo lo ánimos de los mercados financieros, volviendo a descartar alzas de tipos superiores al medio punto porcentual en las próximas reuniones del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) del banco central estadounidense. 

Centrándonos ya en la sesión de hoy decir que esperamos que las bolsas europeas abran al alza, animadas por las noticias que llegan desde Shanghái sobre el posible levantamiento de algunas restricciones -. Si bien la tendencia de la pandemia en la ciudad sigue mejorando -ya van tres días sin que se identifiquen contagios comunitarios-, en otras partes del país, incluida la capital Pekín, la situación sigue siendo complicada, al menos si se atiende a los estándares establecidos por la política de “Covid-cero” que aplican las autoridades chinas. Por lo demás, y como ya comentamos ayer, la principal cita del día para los inversores será la publicación esta tarde en EEUU de las cifras de las ventas minoristas de abril, que se espera hayan seguido creciendo a buen ritmo, impulsadas por las de los servicios y por las alzas de los precios de muchos productos. Además, y como buen complemento a las mismas, de cara a conocer el estado actual del sector, hoy publicarán sus resultados trimestrales dos de las principales compañías estadounidenses del sector de la distribución minorista: Walmart y Home Depot. De la mayor o menor resistencia que muestre el consumo privado estadounidense en los próximos meses va a depender en gran medida la capacidad de esta economía de evitar una fuerte ralentización de su crecimiento e, incluso, de eludir una potencial entrada en recesión. De ahí la relevancia que tienen para los inversores tanto el comportamiento de las ventas minoristas estadounidenses como lo que digan las dos compañías citadas sobre cómo esperan que se comporten sus negocios en los próximos trimestres.