Las bolsas no retomarán su tendencia alcista hasta que no se vislumbre una salida diplomática al conflicto

Guerra abierta entre Israel y Palestina

Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | En una jornada condicionada en todo momento por el comportamiento de los bonos, los principales índices bursátiles europeos cerraron de forma mixta, aunque lejos de sus niveles más bajos del día. Así, y tras un breve inicio alcista de la sesión, los índices se giraron a la baja, lastrados por las caídas de los precios de los bonos y el consiguiente repunte de sus rendimientos.

Esta dinámica llevó a que el interés del bono del Tesoro estadounidense con vencimiento a 10 años superara por momentos el nivel psicológico del 5%, algo que no ocurría desde el año 2007. Ello provocó que las bolsas europeas y los futuros de los principales índices bursátiles estadounidenses se giraran a la baja, alcanzando todos ellos en ese momento sus niveles más bajos del día.

Por la tarde, la recuperación de los precios de los bonos, sin razón aparente -lo achacamos a movimientos de tipo técnico-, precios que llegaron a ponerse en positivo al cierre de la jornada, y la moderación, primero, y las caídas, después, de sus rendimientos permitió a las bolsas europeas y a las estadounidenses recuperar algo del terreno perdido y a algunos de sus principales índices, entre ellos al Eurostoxx 50, al CAC francés y al DAX alemán, cerrar el día con ligeros avances. El Ibex 35, por su parte, lastrado por el comportamiento de los grandes valores, entre ellos por el de los bancos, cerró la jornada con un ligero descenso, por debajo del nivel de los 9.000 puntos, aunque lo hizo lejos de sus niveles mínimos de la sesión.

En Wall Street la jornada, que estuvo igualmente condicionada por el vaivén experimentado por los precios de los bonos y por sus rendimientos, fue de menos a más y de más a menos, lo que llevó tanto al S&P 500 como al Dow Jones a cerrar con ligeras pérdidas, lastrados por el negativo comportamiento del sector energético, que ayer cedió terreno en un claro seguimiento del precio del crudo, que acabó la sesión con pérdidas cercanas al 3%. Por su parte, el Nasdaq Composite, apoyado en el buen comportamiento de los grandes valores del sector tecnológico, fue capaz de terminar la sesión al alza.

Señalar que ayer, a pesar de que fueran los bonos los que marcaran el paso en todo momento a la renta variable, los inversores también estuvieron muy pendientes de las noticias que se iban publicando sobre el devenir del conflicto de Gaza. El principal miedo en los mercados es que Irán termine involucrándose en el mismo, lo que provocaría una guerra de grandes dimensiones en la región y de resultado incierto. De momento, algunos informes sugieren que el Gobierno de Estados Unidos está intercediendo para que Israel retrase la intervención terrestre anunciada en Gaza, para permitir de ese modo que se continúen las negociaciones que se están manteniendo sobre la liberación de los rehenes que mantienen los terroristas de Hamás y sobre la entrada en Gaza de ayuda humanitaria. Este conflicto entendemos que seguirá condicionando de momento el comportamiento de los mercados financieros mundiales, siendo poco probable que las bolsas retomen su tendencia alcista hasta que no se vislumbre una salida diplomática al mismo, algo que, por ahora, parece poco probable.

Hoy, en una jornada que presenta una agenda macroeconómica y empresarial intensa, como analizaremos más adelante, esperamos que las bolsas europeas abran entre planas o ligeramente a la baja, en línea con el comportamiento que han tenido esta madrugada las bolsas asiáticas. Señalar, además, que esta madrugada el precio del crudo está intentando rebotar tras la fuerte caída que experimentó ayer, mientras que tanto el dólar como los rendimientos de los bonos se mantienen estables.

Centrándonos en la agenda macroeconómica del día de hoy, cabe destacar la publicación de las lecturas preliminares del mes de octubre de los índices adelantados de actividad de los sectores de las manufacturas y de los servicios, los conocidos como PMIs que elabora la consultora S&P Global, índices que se espera sigan apuntando a la desaceleración global del sector privado en las mayores economías desarrolladas. Unas lecturas peores de lo esperado, especialmente en Europa, podrían meter nueva presión a las bolsas occidentales, ya que confirmaría que la economía de la región se encamina hacia la recesión.

Por último, y en lo que a la agenda empresarial hace referencia, decir que hoy en las distintas plazas europeas y en Wall Street publican sus resultados correspondientes al pasado trimestre muchas compañías de gran relevancia en sus sectores de actividad, destacando especialmente dos de las grandes tecnológicas estadounidenses: Alphabet (GOOGL-US) y Microsoft (MSFT-US), que lo harán ambas ya con el mercado bursátil estadounidense cerrado. De momento la temporada de publicación de resultados se está mostrando incapaz de mejorar el sentimiento de los inversores, los cuales, por el momento, están obviando las positivas cifras que están dando a conocer muchas empresas, al mantener su atención centrada en otros factores como son la macroeconomía, los tipos de interés y las tensiones geopolíticas.