Más caídas a la espera de la FED

Juan Pablo Uphoff (Singular Bank) | Jornada de alta volatilidad y caídas generalizadas de los principales índices mundiales. Tras la intensa corrección de ayer, los inversores parecen ya haber descontado el mayor endurecimiento de la política monetaria de la Fed. No obstante, la incertidumbre geopolítica, la persistencia de las presiones inflacionistas en máximos y el deterioro de las perspectivas macroeconómicas mantienen la falta de visibilidad sobre la magnitud de la recesión al que parecen avocadas las principales economías.

Los mercados continúan atentos a las decisiones de los bancos centrales, tras confirmarse la significativa revisión a la baja de las expectativas de crecimiento este año y en 2023 y el repunte de la inflación en mayo en EEUU y la Eurozona a nuevos máximos en las últimas décadas. Así, los nuevos datos sobre la evolución de los precios hoy alejan el escenario proyectado por algunas autoridades y analistas que estimaban que las actuales tensiones inflacionistas tocarían techo en este trimestre. En concreto, el Índice de Precios del Productor en EEUU en mayo repunto un 10,8% en términos interanuales y la tasa de inflación en Alemania continuó su tendencia al alza hasta un 7,9% anual. Unos datos que, unidos a los conocidos la semana pasada, constatan las subidas generalizadas de los precios en el conjunto de la economía, y los riesgos de estanflación.

En este contexto, se estaría analizando en la Fed una posible subida de tipos de 75 pb en la reunión de mañana (vs. +50 pb esperados), ante lo que los inversores estarían respondiendo deshaciendo posiciones en los activos de más riesgo y retirándose del mercado de deuda pública, impulsando así la renta variable a terreno negativo y al alza las rentabilidades de los bonos. En este sentido, la inflación en máximos, la disrupción de la cadena de valor global, la desaceleración económica de China que continúa afectada por las restricciones de movilidad y las graves consecuencias socioeconómicas derivadas de la guerra de Ucrania podrían provocar en el 2T la mayor caída conjunta de los índices bursátiles y del mercado de bonos soberanos desde 1990.

Por otro lado, continúa la incertidumbre en torno a la guerra en Ucrania ante las informaciones sobre los avances militares rusos, destacando que la potencia nuclear europea podría alcanzar en los próximos días   el control de Severodónetsk, lo que supondría un importante avance en su objetivo de controlar la región del Donbas. Un escenario que no sólo representaría el dominio del suministro y la producción de las principales materias primas, sino también

Paralelamente, en China, a pesar de los temores de nuevos confinamientos y el endurecimiento de la política monetaria de la Fed, la paulatina normalización de la cadena de valor ha llevado a la bolsa de Shanghái a repuntar en el último mes cerca de un 7%. En esta coyuntura, en la región Asia-Pacífico, se ha registrado un tono mixto en sus principales mercados bursátiles, destacando el avance del 1,02% del Shanghái Composite. En Europa, el Eurostoxx 50 ha caído un 0,78%. Destaca la caída del CAC 40 francés un 1,20% y la ligera caída del FTSE 100 británico, que vuelve a ser el índice europeo con mejor desempeño (-0,25%).

En España, el IBEX 35 ha cerrado por debajo de 8.100 puntos tras caer un 1,43%. Entre sus componentes, las mayores revalorizaciones se han situado en Caixabank (1,92%), Mapfre (0,97%) y Bankinter (0,81%), mientras que las mayores pérdidas se han registrado en Pharma Mar (-9,16%), Cellnex TE (-6,81%) y Solaria (-5,98%).

Finalmente, en EEUU, al cierre de la sesión europea, el SP 500 registra un retroceso de 0,16% cotizando un 20% por debajo de su récord de enero. Por su parte, el índice tecnológico Nasdaq repunta un 0,40%.