Nueva cita con la inflación: se espera una tasa interanual de crecimiento del PCE del 4,9% y del 4,3% de su subyacente

EEUU Precios

Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | En una sesión de continuas idas y vueltas, los principales índices bursátiles europeos y estadounidenses cerraron ayer al alza, recuperando de esta forma parte del terreno perdido en sesiones precedentes. Tal y como esperábamos, las bolsas europeas abrieron al alza, impulsadas por los valores/sectores que habían sido duramente castigados el día anterior, entre ellos el bancario, el de ocio y turismo y los valores tecnológicos, especialmente los relacionados con los semiconductores, que recibieron de forma positiva la fuerte reacción al alza de las acciones de la estadounidense NVIDIA (NVDA-US) en operaciones fuera de hora tras presentar unas cifras y unas expectativas de negocios, muy ligadas al desarrollo de la Inteligencia Artificial (AI), que gustaron mucho a los inversores. El hecho de que los bonos se estabilizaran y recuperaran también algo de terreno, lo que propició un ligero recorte de sus rendimientos, sirvió también para apuntalar los avances de la renta variable europea, como también lo hizo la apertura alcista de Wall Street. Sin embargo, los principales índices de este último mercado perdieron algo de fuerza tras un inicio de sesión prometedor, lo que terminó por arrastrar a la baja a los europeos, que cerraron la jornada lejos de sus niveles más altos del día.

En Wall Street la sesión de ayer fue una auténtica “montaña rusa”, con los principales índices girando al alza y a la baja constantemente, lo que demuestra el elevado grado de incertidumbre y las muchas dudas de unos inversores que no ven claro la tendencia que a medio/corto plazo va a adoptar este mercado. En Wall Street, ayer fueron los valores relacionados con la energía los que mejor se comportaron, animados por el fuerte repunte del precio del crudo, tras varios días consecutivos de descensos. También destacó el comportamiento de las aerolíneas y de los valores tecnológicos, especialmente de los del sector de los semiconductores, animados por el fuerte repunte de la cotización de NVIDIA (NVDA-US), que cerró el día con una revalorización superior al 14%.

En el ámbito macroeconómico, destacar que las lecturas finales de enero del IPC de la Eurozona fueron ligeramente revisadas al alza por Eurostat, algo que adelantamos ayer que podría suceder, ya que en sus cálculos preliminares la agencia europea no pudo contar con los datos del IPC alemán, que no fueron facilitados por la Oficina Federal de Estadística de Alemania, Destatis, por un fallo técnico, que le impidió elaborarlos a tiempo. En ese sentido, señalar que la pequeña revisión al alza de los datos del IPC de enero de la Eurozona con respecto a su estimación preliminar no cambia demasiado el hecho de que, si bien la inflación en la región sigue a la baja -en enero se situó a su nivel más bajo desde el pasado mes de mayo-, su subyacente sigue marcando máximos históricos. No creemos, por tanto, que las cifras publicadas ayer vayan a modificar un ápice la “hoja de ruta” del BCE, que pasa por seguir subiendo sus tasas de interés de intervención hasta, probablemente, el verano.

Además, en Estados Unidos se publicó la segunda lectura del PIB del 4T2022, variable que fue ligeramente revisada a la baja, algo que no tuvo impacto en los mercados, y las cifras de las nuevas peticiones de subsidios de desempleo semanales, cifras que son una buena aproximación del desempleo semanal, y que volvieron a situarse por debajo de las 200.000 peticiones, lo que viene a mostrar un mercado laboral tensionado y, por tanto, potencialmente inflacionista.

Hoy, en una sesión en la que los inversores tienen una nueva e importante cita con la inflación estadounidense, esperamos que las bolsas europeas abran entre planas y ligeramente al alza, siguiendo de esta forma la estela dejada ayer por Wall Street. No obstante, y a la espera de la publicación esta tarde de la lectura de enero del índice de precios del consumo personal, el PCE, que es el indicador de precios más seguido por la Reserva Federal (Fed), es factible que algunos inversores opten nuevamente por las ventas. En principio, se espera que tanto el PCE como su subyacente se hayan moderado ligeramente en enero con relación a su nivel de diciembre. De ser así, y cumplirse lo esperado por el consenso de analistas o, incluso, mejorarlo -tasa interanual de crecimiento del PCE del 4,9% (5% en diciembre) y de su subyacente del 4,3% (4,4% en diciembre)-, entendemos que los inversores reaccionaran de forma positiva. En sentido contrario, unas lecturas por encima de lo estimado por el consenso creemos que provocarán nuevos recortes en los mercados de bonos y de acciones europeos y estadounidenses. Junto con las lecturas del PCE también se dará a conocer la evolución de los ingresos y gastos personales en enero en Estados Unidos, cifras que servirán para hacernos una idea más concreta de la fortaleza por la que atraviesa actualmente el consumo privado, variable clave del PIB estadounidense, y la que puede seguir mostrando. Por último, y algo más tarde, se publicará en Estados Unidos la lectura final del índice de sentimiento de los consumidores de febrero, índice que elabora la Universidad de Michigan y que lleva algunos meses mejorando, alejándose de esta forma de sus mínimos recientes. No obstante, y en nuestra opinión, serán los datos del PCE de enero de Estados Unidos los que determinarán la tendencia de cierre semanal de las bolsas occidentales.

Por último, y centrándonos en la bolsa española, señalar que durante la sesión de hoy publican sus resultados correspondientes al ejercicio 2022 varias compañías cotizadas, entre ellas Endesa (ELE), Amadeus (AMS), FCC, Tubacex (TUB), Sacyr (SCYR) e IAG, lo que mantendrá a los inversores ocupados, analizando las cifras, si bien, como siempre señalamos, será más relevante para el comportamiento de las acciones de estas empresas lo que digan sus directivos sobre el devenir de sus negocios y, en algunos casos, sobre sus políticas de remuneración a sus accionistas.