Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | Las bolsas europeas y estadounidenses inician hoy una nueva semana con los inversores cada vez más centrados en los fundamentales de las cotizadas y menos pendientes de los potenciales movimientos de los tipos de interés oficiales, algo que consideramos positivo y que puede, de continuar, servir como catalizador de nuevas alzas en estos mercados. Así, todo parece indicar que los inversores ya dan por hecho que los bancos centrales no comenzarán a reducir sus tipos de interés oficiales, como pronto, hasta junio, y que lo harán muchas menos veces de lo que descontaban los mercados al inicio del presente ejercicio.
Detrás de esta importante recalibración de las expectativas de tipos por parte de los mercados hay tres razones, fundamentalmente: i) que la inflación, si bien ha continuado ralentizándose, lo está empezando a hacer algo más pausadamente de lo esperado; así, lo que se ha catalogado como “última milla” hasta alcanzar el objetivo del 2% establecido por los bancos centrales parece que va a ser más complicada de superar de lo en un principio estimado; ii) las economías europeas y la estadounidense se están comportando mejor de lo anticipado por los analistas, si bien la segunda se está mostrando mucho más sólida que las primeras; y iii) los mercados laborales, tanto en Europa como en Estados Unidos, siguen muy sólidos, con las tasas de desempleo, como se pudo comprobar el viernes en la Eurozona, marcando mínimos históricos o situándose muy cerca de ellos, lo que siempre es “una amenaza” inflacionista, vía el incremento de los salarios. En este sentido, señalar que la reacción de los mercados de bonos a la mencionada recalibración de expectativas de tipos sí que ha sido negativa y que, a pesar del significativo repunte de sus rendimientos, las bolsas han sido capaces de seguir subiendo.
Sobre todo ello esperamos que hable la presidenta del BCE, la francesa Christine Lagarde, en la rueda de prensa que se celebrará el jueves tras la reunión de marzo del Consejo de Gobierno del organismo, reunión que será una de las principales citas de esta semana para los inversores. En principio, no se espera que el BCE vaya a anunciar cambios en su política monetaria, aunque sí habrá que estar atentos a lo que pueda señalar el Consejo en su comunicado y Lagarde ante la prensa sobre potenciales movimientos, especialmente de los tipos de interés. Además, el BCE dará a conocer su cuadro macroeconómico de primavera, lo que ofrecerá mucha información a los inversores sobre cómo espera la institución que se comporten en los próximos trimestres tanto la economía de la Eurozona como la inflación. Por tanto, cita que será relevante para los inversores, aunque no creemos que el resultado de la misma vaya a ser determinante para el comportamiento de los mercados, salvo sorpresa por parte del BCE, que no esperamos.
La otra gran cita de la semana tendrá lugar el viernes y será la publicación en Estados Unidos del informe de empleo no agrícola del mes de febrero. En principio, se espera que la economía estadounidense haya seguido creando empleo a buen ritmo -el consenso de analistas espera la creación de unos 200.000 empleos netos en el mes y que la tasa de desempleo se haya mantenido en el 3,7%-. Cualquier sorpresa en un sentido u otro podría “mover” los mercados, especialmente si la cifra se sitúa muy por debajo de lo esperado, algo que, de suceder, sería bien acogido por los mercados de bonos y, probablemente, no tanto por los de renta variable, que verían en ello motivos para pensar que la economía del país comienza a enfriarse.
Por lo demás, y sin abandonar la agenda macroeconómica de la semana, señalar que mañana se darán a conocer en la Eurozona, sus principales economías, el Reino Unido y Estados Unidos las lecturas finales de febrero de los índices adelantados de actividad de los sectores de servicios, los PMIs servicios que elabora S&P Global, y el ISM servicios estadounidense. En principio se espera que el sector haya tenido un positivo comportamiento en el citado mes, con el de la Eurozona alcanzando el nivel de estancamiento tras meses en los que ha estado contrayéndose, y los del Reino Unido y Estados Unidos expandiéndose ligeramente.
Por último, señalar que la agenda empresarial, ya con las temporadas de publicación de resultados trimestrales prácticamente finalizadas tanto en las principales plazas europeas como en Wall Street, se presenta muy tranquila, sin nada especial que destacar que pueda “mover” los mercados. En este sentido, decir que la temporada ha sido, en general, positiva, con las compañías mostrándose en muchos casos más optimistas con el devenir de sus negocios de lo en principio anticipado.
Hoy esperamos que las bolsas europeas abran de forma mixta, sin una tendencia definida, con los inversores haciendo un “alto en el camino”, a la espera de las citas más relevantes de la semana, que tendrán lugar en las dos últimas sesiones de la misma. Destacar, por otra parte, que las bolsas asiáticas han cerrado de forma mixta, sin grandes cambios, con el Nikkei japonés al alza, siendo capaz de cerrar por primera vez en su historia por encima de los 40.000 puntos, apoyado en el buen comportamiento de los valores tecnológicos, especialmente de los relacionados con la Inteligencia Artificial (IA). El dólar, por su parte, cede esta madrugada algo de terreno frente a las principales divisas europeas, y el precio del crudo se muestra estable, obviando de momento la decisión de la OPEP+ de mantener sus recortes de producción, por lo menos hasta mediados del presente ejercicio.