Tras esta información los títulos de la compañía empezaban a moverse hasta que, por falta de información oficial a este respecto, quedaba suspendida de cotización pasadas las 20h (hora española). Las acciones estuvieron suspendidas dos horas y finalmente subieron ayer un +10,99% hasta los 379,57 dólares/acción.
Musk seguía twiteando y entre sus mensajes, destacamos que los accionistas podrían o bien vender a 420 dólares sus acciones o bien mantenerlas e ir a privado o que a gente podrá seguir invirtiendo en Tesla una vez sea privada; además, también exponía que habrá muchas menos complicaciones cuando Tesla sea una empresa privada.
Por otro lado, acabamos de conocer que los banqueros cercanos a Tesla no tenían ningún conocimiento de esta operación, según la CNBC. Además, hace escasos minutos comenta la CNBC también un email de Musk a sus empleados en el que decía que la decisión final no está tomada, pero que llevar la empresa a título privado sería el mejor camino.