BBVA Research | En este Observatorio se evalúan los factores que explican el comportamiento cíclico del PIB y el consumo privado en España hasta 1T2025.
La brecha del PIB por persona en edad de trabajar (PET) con respecto a su nivel tendencial se sitúa en -0,9 pp en el 1T2025, mientras que la tasa de crecimiento interanual del PIB por PET fue ligeramente superior a su media tendencial.
Los shocks de oferta han contribuido negativamente, con alrededor de -0,2 pp del crecimiento interanual del PIB por PET en el 1T2025. Dentro de este tipo de perturbaciones, únicamente los márgenes salariales (0,3 pp) y los diferenciales de tipos (0,2 pp) han contribuido positivamente.
Los shocks a la demanda de consumo y vivienda, y el crédito han contribuido positivamente al crecimiento del PIB, con unas 7 décimas, destacando la contribución positiva de las perturbaciones de crédito, y demanda de consumo y vivienda.
El indicador de tensionamiento del mercado de trabajo en España sigue elevado. Con respecto al cuarto trimestre de 2019, la relación vacantes/desempleo ha crecido un 71%, al pasar de 3.4% al 5,8% (2.4 pp).
El arranque de 2025 ha sido positivo para el crecimiento del PIB por persona en edad de trabajar, tanto por el buen comportamiento de la productividad, como de las horas por persona en edad de trabajar.
El sector exterior ha sostenido el crecimiento post-crisis, con exportaciones por encima de las importaciones desde 2020 y superávits crecientes en la balanza por cuenta corriente.
Las exportaciones presentan tasas de crecimiento por debajo de la media desde mediados de 2023, explicadas mayoritariamente por shocks negativos de demanda externa. Las importaciones también se frenan, impulsadas por la mejora en la competitividad doméstica.
A partir del promedio obtenido bajo distintos escenarios sobre la subida de los aranceles, se estima una caída media del 1,6 % en exportaciones totales y una reducción del PIB de 0,3 pp en promedio entre 2025-2027, respecto a su nivel en el escenario base sin aumento de los aranceles, con efectos casi neutros sobre la balanza comercial.
España muestra, en relación a otros países europeos, una posición negociadora relativamente favorable frente a EE. UU. en comercio de bienes y proteccionismo no arancelario, pero de debilidad relativa en inversión directa en EE. UU. y esfuerzo en gasto en defensa respecto a sus socios europeos (UE8).
La comparación internacional indica que, pese a no satisfacer todas las demandas expresadas hasta el momento por la Administración Trump, España mantiene una posición negociadora comparable o incluso mejor que la media de la UE8.