Cristina Gavín (Ibercaja Gestión) | En la reunión de Jackson Hole del pasado mes de agosto, Powell abrió la puerta a una bajada del tipo de intervención en esta reunión de septiembre. La debilidad que se deja entrever en el mercado laboral desde hace ya varios meses justificaría esta decisión que el mercado da por hecha. De forma que, tras la reunión de este miércoles, el tipo de intervención se situaría en el 4%.
Los riesgos de inflación se mantienen al alza, el dato de precios que conocíamos el jueves, -2,9% interanual- aunque se situó en línea con lo esperado, comienza a reflejar el traslado de los aranceles a los precios finales. Esto lleva a que exista cierta preocupación en el consenso de inversores ante la idea de que esta relajación en el tipo de intervención podría alimentar todavía más las tensiones inflacionistas incipientes que estamos comentando, bajo la sombra de una Reserva Federal cuya independencia se empieza a erosionar presionada por la administración Trump.
En este contexto será especialmente interesante prestar atención a las palabras de Powell en lo que a sus expectativas sobre la economía norteamericana se refiere, y lo que podemos esperar de cara a la parte final del año. Aunque el mercado descuenta dos bajadas más de 25 pb que llevarían al tipo de interés a situarse en el rango 3,50%-3,75%, quizás sea un movimiento muy agresivo dado el contexto actual, y se limite a una única bajada adicional antes de finalizar el año.



