Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | En una nueva sesión de escasa actividad, y con los inversores a la espera de conocer hoy el dato del IPC de abril de Estados Unidos, los principales índices bursátiles europeos y estadounidenses cerraron ayer en su mayoría a la baja, tras mantenerse en negativo durante gran parte de la jornada. Sin catalizadores que impulsaran al alza los mercados, la atención de los inversores siguió puesta en tres factores principalmente: i) el dato de inflación de abril de Estados Unidos, que se dará a conocer esta tarde y sobre el que luego profundizaremos; ii) la “batalla política” en Estados Unidos por el techo de la deuda, que ayer tuvo un nuevo episodio con la reunión que mantuvo el presidente Biden con los líderes republicanos y demócratas del Congreso y en la que, como se esperaba, no se alcanzó ningún acuerdo aunque, entendemos, la reunión debe ser el principio del proceso de negociación; y iii) el comportamiento bursátil de los bancos regionales estadounidenses que ayer fue, sorprendentemente, de menos a más, cerrando la jornada la cotización de muchos de ellos en positivo tras haber cedido terreno con fuerza al comienzo de la sesión.
Centrándonos en el comportamiento sectorial en las bolsas europeas, destacar que ayer fue el sector del ocio y turismo el que mejor lo hizo, liderado por las acciones de IAG (+3,95% al cierre) mientras que las inmobiliarias patrimonialistas lideraron los descensos. Este sector está comenzando a generar muchas dudas entre los inversores dado el elevado apalancamiento tradicional con el que operan las compañías que lo integran y por el fuerte incremento de los tipos de interés, escenario que para este tipo de sociedades puede empeorar todavía más si la economía de la región se ralentiza con fuerza. En Wall Street, por su parte, sólo destacó el buen comportamiento de algunos valores industriales, mientras que los valores de materiales y los tecnológicos se quedaron algo rezagados, con estos últimos lastrando el comportamiento del Nasdaq Composite, en el que mantienen un peso elevado. En este sentido, señalar que el lunes este índice entró en un nuevo mercado alcista tras haberse revalorizado más del 20% desde su último mínimo de 10.213,29 puntos, marcado el 28 de diciembre pasado. Cabe recordar, además, que el Dow Jones ya entró en mercado alcista el 30 de noviembre del año pasado, mientras que el S&P 500 es el único índice, de entre los principales de Wall Street, que todavía no ha logrado superar el mercado bajista en el que lleva inmerso más de un año.
En lo que hace referencia a la sesión de hoy, y como venimos señalando desde comienzos de esta semana, cabe destacar la publicación del IPC estadounidense del mes de abril, dato que entendemos puede condicionar, para bien o para mal, el comportamiento en el corto plazo de los mercados de bonos y de acciones estadounidenses y, por ello también, el de los europeos. En ese sentido, cabe recordar, como ayer mismo hizo el presidente de la Reserva Federal de Nueva York, John Williams, que el banco central estadounidense no ha dado “oficialmente” por terminado el proceso de alzas de los tipos oficiales y que su política seguirá dependiendo de los datos que se vayan publicando en los próximos meses, especialmente de los de la inflación. Por tanto, esperamos que hoy los mercados reaccionen en uno otro sentido, dependiendo de las lecturas que se den a conocer. En principio se espera que la inflación general se haya mantenido en abril en el 5% y que su subyacente haya descendido dos décimas, hasta el 5,4%. Unas lecturas por encima de las estimadas por el consenso de analistas provocarán caídas tanto de los precios de los bonos, con el consiguiente repunte de sus rendimientos, como en los de las acciones ya que los inversores interpretarán que la Fed puede volver a subir sus tasas de interés de referencia en la reunión que celebrará en junio su Comité Federal de Mercad Abierto (FOMC). En sentido contrario, unos datos “mejores” de lo proyectado por los analistas creemos que serán celebrados con alzas en ambos mercados, con muchos inversores volviendo a apostar por potenciales recortes de tipos este año, hipótesis ésta que seguimos sin compartir.
De este modo, esperamos que hoy, y hasta que se den a conocer las mencionadas cifras de inflación a primera hora de la tarde (14:30 horas; CET), los principales índices europeos abrirán sin una tendencia definida, moviéndose posteriormente en un estrecho intervalo de precios, en un ambiente de escasa actividad. Decir, además, que por la mañana se conocerán las lecturas finales de abril del IPC de Alemania, dato para el que no esperamos sorpresas, ya que habitualmente coincide con su lectura preliminar y, por lo tanto, no suele influir en la marcha de los mercados.
