La inflación final de agosto en la Eurozona no debería arrojar sorpresas: +3% i.a. general y +1,6% i.a. subyacente, coherente con el mensaje dovish del BCE

Bandera Eurozona

Renta 4 | La última sesión de la semana apunta a una apertura al alza (futuros Eurostoxx +0,7%, S&P +0,1%) en una sesión en la que el vencimiento de opciones y futuros podría incrementar la volatilidad y en un entorno en el que los últimos datos americanos apuntan a una economía más sólida de lo que parte del mercado pensaba.

En la Eurozona se publicarán los datos finales en términos i.a. del IPC final de agosto, en tasa general +3%e y preliminar (vs +2,2% anterior) y subyacente +1,6%e y preliminar (+0,7% anterior).

Ayer vimos una nueva señal de recuperación en el sector manufacturero en EEUU tras las recientes señales de debilidad, al superar claramente las estimaciones de mercado la Philly Fed de septiembre, al igual que lo hiciera la encuesta manufacturera de Nueva York el día previo. Tras este dato, la TIR del T-bond ha repuntado ligeramente (+4 pb, hasta 1,33%), recogiendo también el gran dato de ventas minoristas, que repuntaron contra pronóstico. Hoy esta mejora en el cuadro macro americano podría completarse con un avance en la confianza de los consumidores de la Universidad de Michigan (dato preliminar de septiembre), de la que se espera que avance hasta 72e (vs 70,3 anterior), y también conoceremos sus dos componentes, situación actual (78,5 anterior) y expectativas (65,1 anterior).

Por su parte, la inflación final de agosto en la Eurozona no debería arrojar sorpresas: +3% i.a. general y +1,6% i.a. subyacente, coherente con el mensaje dovish del BCE, en la medida en que reiteran la idea de repunte coyuntural pero no estructural. Un BCE que ha refutado el artículo del FT que afirmaba que el organismo espera alcanzar su objetivo de inflación en 2025 y que la primera subida de tipos podría llegar tan pronto como en 2023.