Juan J. Fdez-Figares (Link Securities) | En una sesión en la que los bonos volvieron a ser los grandes protagonistas, los principales índices bursátiles europeos, yendo de más a menos, cerraron ayer de forma mixta y sin grandes cambios, tendencia de la que se desmarcó el Ibex-35, que terminó con una caída superior al 1%, situándose nuevamente por debajo de los 10.000 puntos. En ello tuvo mucho que ver el fuerte castigo que recibieron las acciones del Santander (SAN), uno de los valores que más pesa en el índice, que cedieron más del 5% al cierre de la jornada, lastradas por la noticia publicada por el Financial Times, en la que decía que, junto al Lloyds británico, no habían evitado que una empresa iraní sancionada por Estados Unidos mantuviera cuentas en la entidad y moviera dinero a través de filiales ficticias. Otras entidades, como fue el caso de la italiana UniCredit (UCG-US), fueron sancionadas en su día por temas similares, “amenaza” que ayer se reflejó en el comportamiento de las acciones del banco español. La entidad, a través de un portavoz oficial, intentó desmentir su responsabilidad, algo que no evitó el castigo en bolsa a sus acciones.
Centrándonos en los grandes protagonistas de ayer, los bonos, señalar que, por segundo día de forma consecutiva, los precios de estos activos fueron duramente castigados, lo que ha provocado que en este periodo de tiempo sus rendimientos se hayan disparado al alza. En ello tuvieron mucho que ver ayer las declaraciones del presidente de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, realizadas este fin de semana en un programa en televisión en las que volvió a insistir que el banco central estadounidense no estaba pensando en estos momentos en comenzar a bajar sus tasas de interés dada la fortaleza mostrada por el mercado laboral y por la economía del país, así como por el hecho de que la inflación continúa todavía muy por encima del objetivo del 2%. Powell, como ya había hecho la semana pasada en la rueda de prensa posterior a la reunión de dos días que mantuvo el Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Fed, volvió a descartar marzo como la fecha en la que el organismo comenzaría a bajar sus tasas, reiterando que, por el momento, la Fed se mantiene a la espera. Si a estas declaraciones unimos los últimos indicadores macroeconómicos publicados en Estados Unidos, entre ellos los de empleo de enero y los índices de gestores de compra del sector servicios del mismo mes, el PMI servicios y el ISM servicios, índices que se dieron a conocer ayer, que apuntan todos ellos a que la economía del país sigue creciendo con solidez, el castigo recibido por los bonos se puede llegar a justificar. Lo que no es tan comprensible es que ese castigo se haya extendido a los bonos de la Eurozona, dado que la economía de la región dista mucho de estar comportándose como la estadounidense, siendo más factible, por ello, que el BCE, si la inflación se lo permite, baje sus tasas de interés antes que la Fed.
Así, y durante toda la sesión de ayer, el repunte de los rendimientos de los bonos lastró el comportamiento de las bolsas, especialmente en Wall Street, donde los principales índices cedieron terreno con más fuerza que los europeos, con los valores de sectores de corte más defensivo, como los de alimentación y bebidas y los del sector sanitario, aguantando mejor que el resto. Por tanto, y de momento, continúa la “tipo dependencia” de las bolsas, con los inversores más centrados en la macroeconomía y en lo que harán los bancos centrales que en los resultados trimestrales que están dando a conocer las cotizadas.
Hoy, y en una sesión que presenta una agenda macro liviana, en la que únicamente destaca la publicación en la Eurozona de las ventas minoristas de diciembre y en Alemania de los pedidos de fábrica del mismo mes, datos que no creemos sean capaces de “mover” los mercados, los inversores seguirán pendientes del comportamiento de los bonos. Un rebote de sus precios y el consiguiente repliegue de sus rendimientos creemos que impulsará al alza a los mercados de renta variable.
En principio, esperamos hoy una apertura ligeramente al alza de las bolsas europeas, mientras que el dólar, los bonos y el precio del petróleo se muestran estables. Por su parte, cabe destacar el fuerte repunte experimentado esta madrugada por los principales índices bursátiles chinos, repunte favorecido por las medidas intervencionistas que está implementando el Gobierno chino para evitar que las bolsas del país sigan desplomándose.