La corrección de los bonos de febrero en el tramo corto de la curva debe atemperarse con las cifras macroeconómicas

François Rimeu, estratega senior en La Françise AM | La corrección de la renta fija continuó en febrero con movimientos bastante violentos en la parte corta de la curva de rendimientos, tanto en Europa como en Estados Unidos. ¿La razón? En ambas regiones, las cifras de inflación superaron las expectativas, lo que llevó a los banqueros centrales a reafirmar, de forma algo más ruidosa, su reticencia a bajar los tipos de interés.

Simultáneamente, las cifras macroeconómicas tendieron a tranquilizar a los inversores, explicando en parte la confianza exhibida por nuestros banqueros centrales el mes pasado. Entre estas cifras, podemos mencionar, sin ningún orden en particular, la creación de 353.000 puestos de trabajo en Estados Unidos, frente a los 185.000 previstos en febrero, así como los PMI manufactureros que confirman su recuperación en todo el mundo, incluida la zona euro (excluida Alemania de momento).

No obstante, es necesario señalar varias cosas en relación con esta corrección de los bonos:

  • El escenario previsto por los swaps de inflación sigue siendo el mismo: hay poco (o muy poco) riesgo de inflación a medio y largo plazo. El swap de inflación a 10 años en euros se sitúa actualmente en el 2,18% y en el 2,47% en Estados Unidos. Esto es más alto que los niveles pre-COVID, pero bastante cerca del período 2010-2015 y coherente con los objetivos de los bancos centrales. Los mercados siguen considerando creíbles a los bancos centrales.
  • El extremo más largo de la curva de rendimientos se mantuvo muy moderado, y la volatilidad, aunque históricamente muy alta, parece seguir tendiendo a la baja. Esta reacción limitada parece lógica teniendo en cuenta el escenario de inflación benigna para los mercados.
  • Por último, los activos de riesgo se comportaron muy bien, para sorpresa de muchos participantes. Una vez más, esto parece coherente dada la relativa calma del extremo más largo de la curva (nominal y real).

Los mercados anticipan ahora ciclos de recortes de tipos que no comenzarán hasta junio, lo que concuerda con las comunicaciones de los bancos centrales. Salvo sorpresas significativas en materia de inflación, esto no debería cambiar mucho antes de finales de mayo y debería permitir a la volatilidad continuar su lento descenso.

Mientras tanto, los mercados de renta variable disfrutan de su mejor momento, con importantes ganancias en el último mes. Cabe destacar el resurgimiento de los valores chinos (+8,55% para el MSCI China) y el buen comportamiento de los valores estadounidenses de pequeña capitalización (+5,52% para el Russell 2000), mientras que los sectores relacionados con las materias primas siguen registrando unos resultados bastante inferiores a los de los índices. La fuerte temporada de beneficios en Estados Unidos ha contribuido a sostener las valoraciones