El consenso de economistas augura ahora un 2023 sin recesión en la eurozona: +0,1%

Santander | El rebote económico, las menores emisiones y los flujos hacia fondos de crédito (15 semanas de entradas seguidas en €IG): bálsamos ante el peor tono reciente de rates. Y el crédito contado lograba blindarse el viernes ante el sell-off del Bund (+11pb en el 10 años) y de los spreads periféricos (BTP +10pb), con ligeras mejoras y con las bases cerrándose. A la espera de los flash PMIs (mañana) e IFO (miércoles), el consenso de economistas (sondeo del FT) augura ahora un 2023 sin recesión en la EZ (+0,1%). El mejor tono, visible en el barómetro de la economía global, el cobre (en máximos de 7 semanas), ya comenzó a filtrarse en Davos con el FMI apuntando a una posible revisión al alza de las previsiones de crecimiento global. Algo muy importante a las puertas de la publicación de resultados del 4T en Europa. Algo también relevante para un primario que ya empieza a ralentizarse, con €29mm la pasada semana (vs €58mm y €47mm las dos previas) y con un mes de febrero a la vista que históricamente suele ser más lento que enero y marzo (8% de peso del total vs 11% en enero y marzo). Con todo, Europa vuelve a enfriarse y las reservas de gas rápidamente cambian de sesgo, con Alemania pasando del reciente pico del invierno del 92% a un 86% y el viernes el precio del gas (TTF) saltaba un 10%. Y eso no es todo, a sólo una semana de las críticas reuniones de la Fed y BCE, y del IPC preliminar de enero en la EZ, el BCE sigue arrojando un jarro de agua fría sobre los rumores que apuntaban a una cierta relajación en el ritmo de endurecimiento a partir de marzo.