EL S&P500 sale del mercado bajista

Banca March | Los principales índices bursátiles de Wall Street cerraron la semana pasada con pequeños avances, a la espera de los datos de inflación en EE.UU. -mañana- y las decisiones de política monetaria sobre tipos de interés de la Fed -miércoles- y Banco Central Europeo -jueves-, respectivamente.

El S&P, que salía del territorio bajista más largo visto desde los años 40, al cerrar un 20% por encima de los mínimos vistos en octubre del año pasado, avanzó un 0,4% en su cuarta semana consecutiva en positivo.  El tecnológico Nasdaq, por su parte, logró un +0,1%, séptima semana consecutiva alcista en su mejor racha desde 2019, y +0,3% para el Dow Jones. Bien también el índice de acciones de pequeña capitalización, el Russell 2000, con +1,9% e el acumulado semanal.

En conjunto, los datos económicos vistos durante la semana pasada dieron fuerza a la narrativa de la pausa de la Fed, entre otros el ISM de servicios en EE. UU., que prácticamente se estancaba en mayo, unos pedidos de fábrica creciendo menos de lo esperado en abril y un dato de peticiones semanales de subsidio de desempleo en su nivel más alto desde octubre de 2021. Son datos todos ellos que apuntan a signos de moderado enfriamiento de la economía y que sugieren el empeoramiento del hasta ahora percibido como resiliente mercado laboral. En estos momentos, los mercados actualmente pronostican una probabilidad del 71% de que la Fed haga una pausa en su serie de aumentos de tasas, si bien recientes encuestas a economistas sugieren que la senda restrictiva podría volver a retomarse, en hasta dos ocasiones más.

Antes de la decisión en tipos, que conoceremos el miércoles, el mercado estará atento al dato de inflación mañana martes, con expectativas de una importante moderación hasta niveles del 4,1% interanual (vs +4,9% en abril), gracias al menor impulso de los precios energéticos que justificaría la pausa de la Fed. La inflación subyacente podría alcanzar niveles del 5,2% interanual, ligeramente por debajo del 5,5% visto en la lectura de abril pero todavía en niveles elevados gracias en parte a partidas como la de precios de coches de segunda mano.

En la eurozona, mientras tanto, continúa la senda de moderación de los precios -desde el 10,6% interanual pico vista en octubre hasta el 6,1% de mayo- mientras asistimos a una contracción técnica, ligera, en el bloque comunitario coincidente con los dos trimestres consecutivos de caídas en la actividad de Alemania, la locomotora de la región. Se da por seguro una nueva subida de 25 p.b. en el tipo oficial de depósito el próximo jueves, hasta el 3,50%, y esperaríamos al menos una subida adicional antes de que acabe el año, probablemente en julio, con la que el organismo calibre el impacto en salarios y economía real de dichas subidas. La mayor preocupación sigue centrada en la persistente inflación subyacente, actualmente situada en el 5,3% interanual.