La volatilidad ha vuelto

Edmond de Rothschild AM | En Estados Unidos, se han publicado algunos indicadores a la baja y siguen apuntando a una recesión. En Japón, el banco central ha vuelto a “engañar” a los inversores al mantener los tipos sin cambios, aunque la inflación haya aumentado. Somos tácticamente más defensivos en el mercado de renta variable y, sin embargo, más optimistas en la deuda corporativa

La confianza de los consumidores estadounidenses se ha recuperado, pero numerosos indicadores adelantados en Estados Unidos están a la baja y siguen apuntando hacia una recesión. Sin embargo, varios índices mostraron una ligera recuperación de las expectativas a 6 meses. El Libro Beige de la Fed confirmó la ralentización de la economía y el mismo mensaje se reflejó en las ventas retail, que bajaron un 1,1% en diciembre, tras la revisión a la baja de las cifras de noviembre, y en la producción industrial, que se situó un 0,7% por debajo.

Por el contrario, los datos de la eurozona fueron mejores de lo esperado. La producción industrial de noviembre subió un +1% y el indicador avanzado ZEW de enero superó las expectativas, situándose en +16,7 cuando en diciembre había sido de -23,6.

En China, las expectativas para el PIB del cuarto trimestre eran muy bajas, debido a la perturbación generalizada tras el abandono de la política de Covid cero . Pero las cifras fueron mejores de lo esperado y el PIB se estabilizó, ayudado por un repunte del consumo en diciembre.

En Japón, el banco central volvió a confundir a los inversores al mantener los tipos sin cambios, a pesar de que la inflación subió al 4% interanual en diciembre.

Tras un fuerte repunte en año nuevo, los índices perdieron terreno debido a los decepcionantes datos económicos de EE.UU., el bloqueo del techo de la deuda estadounidense, los resultados desiguales del cuarto trimestre de las primeras empresas en informar y los persistentes comentarios de los bancos centrales sobre la necesidad de nuevas subidas de tipos.

En consecuencia, seguimos de cerca los aspectos técnicos de los mercados de renta variable. La volatilidad de los mercados de renta fija y variable ha divergido, lo que nos lleva a ser tácticamente más defensivos. Sin embargo, somos más optimistas respecto a la deuda corporativa. Creemos que las subidas de tipos del BCE ya se tienen en cuenta en la deuda pública, por lo que estamos reforzando la duración en la eurozona.

MERCADOS EUROPEOS

Los mercados terminaron la semana con cautela debido a (i) las expectativas de que el BCE se mostrara más agresivo, (ii) la preocupación por la persistente volatilidad de los precios energéticos y (iii) unos resultados del cuarto trimestre, peores de lo esperado por parte de las primeras empresas en reportar. En el foro económico de Davos, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, subrayó que la inflación era demasiado elevada, lo que sugiere que, al igual que en Estados Unidos, se avecinan nuevas subidas de los tipos de interés. Los sectores defensivos fueron los más favorecidos durante la semana y la tecnología quedó al margen. Los precios del gas se desplomaron un -15% a principios de semana, hasta situarse en torno a los 55 euros/MWh, su nivel más bajo desde septiembre. Los elevados inventarios en China enviaron a los petroleros de GNL hacia Europa, mientras que la producción de los parques eólicos fue fuerte.

En cuanto a noticias empresariales, ADP dijo que el tráfico aéreo de diciembre se situaba en el 94% de los niveles previos a la pandemia de 2019. Algunas empresas como ASM International (semiconductores) están entusiasmadas con la reapertura de China. Las empresas de lujo como Burberry y Richemont también se muestran optimistas a pesar de las las poco alentadoras cifras de ventas. Sin embargo, el CEO de Unilever se mostró más cauto con respecto a los bienes de consumo básico, ya que considera que los costes seguirán ejerciendo presión en los próximos meses. Por su parte, Procter and Gamble registró unas ventas inferiores a lo esperado en el cuarto trimestre. En preanuncios, Fnac Darty (retail) dijo que su flujo de caja libre se había deteriorado significativamente en 2022. La empresa de software Temenos aprovechó unas cifras optimistas para anunciar la dimisión de su Consejero Delegado. En el sector químico, los resultados preliminares de BASF para 2022 indicaron una pérdida debida a Rusia y Covestro emitió unaviso de beneficios.

MERCADO EE.UU.

Wall Street terminó la semana en terreno negativo, con el S&P500 y el Nasdaq perdiendo un -1,78% y un -0,73%. El sentimiento se vio afectado por los malos datos económicos y los comentarios ‘hawkish’ de la Reserva Federal.

Las ventas retail cayeron un -1,1% intermensual en diciembre, su mayor caída en un año. La producción industrial bajó un 1,7%, cuando se esperaba que sólo bajara un 0,1%. Los precios de producción siguieron acercándose a niveles normales, con una subida interanual del 6,2%, mejor que el 6,8% previsto por los analistas.

Las ventas de viviendas nuevas bajaron por cuarto mes consecutivo, pero las solicitudes de subsidio de desempleo cayeron a mínimos no vistos desde septiembre. A pesar de los titulares sobre despidos, el mercado laboral parece especialmente boyante.

La vicepresidenta de la Fed, Lael Brainard, que suele tener una postura ‘dovish’, declaró el jueves que los tipos tendrían que seguir subiendo durante algún tiempo para frenar la inflación.

John Williams, de la Fed de Nueva York, afirmó que, con una inflación tan elevada y persistente y desequilibrios de oferta y demanda, era evidente que quedaba mucho por hacer para que la inflación volviera al objetivo del 2% y se mantuviera en él.

Según Refinitiv, se espera que los beneficios del cuarto trimestre del S&P500 bajen un 2,2% de media.

Los bancos fueron, como de costumbre, los primeros en informar, y el panorama fue desigual. Los resultados de JP Morgan, Bank of America, Wells Fargo y Citigroup fueron optimistas gracias a la subida de los tipos de interés y a un aumento limitado de las provisiones. Morgan Stanley también se benefició de los buenos resultados de la gestión de activos. Sin embargo, Goldman Sachs se vio afectado por los malos resultados de la banca de inversión. El banco también tiene un plan de reducción de plantilla de a más de 3.000 personas.

Por otro lado, también se espera que Microsoft despida a 10.000 empleados, alrededor del 5% de su plantilla. El grupo también anunció que su chatbot de inteligencia artificial (desarrollado por Open AI) se incorporaría pronto a su plataforma en la nube Azure.

KKR siguió el ejemplo de Blackstone al frenar los reembolsos en su fondo inmobiliario.

Netflix consiguió muchas más suscripciones nuevas de lo esperado y anunció que su cofundador, Reed Hastings, dejaba su puesto de co-CEO para convertirse en presidente del consejo de administración