Intermoney | Hay un intenso debate sobre si los aranceles de Trump serán inflacionarios para la economía bestadounidense en su conjunto. Seguramente habrá un impacto en determinados sectores específicos. Por ejemplo, EEUU depende en gran medida de Canadá y México en sectores clave, en particular la energía y los minerales, los automóviles, la madera y la agricultura. Si se aprueban los aranceles, el dolor económico se sentiría más en Canadá y México considerando que las exportaciones de bienes canadienses a EEUU suponen el 20% del PIB de Canadá mientras que con México es del 25%. Aranceles de un 25% tendrían un impacto de cerca de 3 p.p. sobre el PIB de sendas economías.

Más países en el punto de mira
Las cifras de exportaciones de Vietnam, Tailandia o Taiwan a EEUU apoyarían la tesis de la sustitución de importaciones al ser países con situaciones complicadas con China, pero también se puede plantear hasta qué punto las empresas chinas están esquivando aranceles exportando desde otros países en los que, simplemente, empaquetan sus productos. Debemos de considerar que estos déficits con otros países tampoco gustan a Trump, por lo que estamos hablando de áreas económicas que también pueden estar sujetas a riesgos arancelarios. No nos extraña que el gobierno de Tailandia haya dado órdenes a las empresas petroquímicas del país de aumentar significativamente la compra de etano estadounidense en un intento de evitar daños a su economía impulsada por las exportaciones.

Uno de los motivos de extorsión de Trump
El peso de las exportaciones en el PIB de EEUU es realmente reducido y esto explicaba la beligerancia de Trump en
materia comercial. No obstante, los consumidores y empresas estadounidenses se benefician en gran medida de los menores precios vía importaciones y sufren el lastre de los impuestos a la importación.
Las propuestas de Trump además, según proyecciones del Peterson institute for International Economics (PIIE) basada en una tasa arancelaria del 10% tendrían un coste a los hogares estadounidenses de clase media de 1.700$ en impuestos adicionales cada año. También se ha estimado que los aranceles reducirían los ingresos netos de los hogares en aproximadamente un 3,5%. El peso de las exportaciones en Europa, combinado con la debilidad económica en Alemania, adelanta importantes fricciones internas en la UE. Lo que si hemos visto es una reducción del peso de las exportaciones en el PIB.

Impuestos: lo comido por lo servido

Los aranceles generan represalias que reducen las exportaciones, sin contar la necesidad de llevar a cabo transferencias de los derechos recaudados a las empresas afectadas. Por ejemplo, los agricultores estadounidenses que enfrentaron aranceles de exportación de represalia durante la guerra comercial de 2018-2020 recibieron subsidios federales que totalizaron el 93% de los derechos recaudados por aranceles. El gobierno federal terminó recaudando sólo el 7% de los ingresos arancelarios.
El antidumping seguirá escalando
Las medidas de anti-dumping son la mejor excusa para aplicar aranceles. Buena parte de la culpa la tiene China. Hay una preocupación por que las políticas de apoyo industrial y macropolíticas chinas, que se centran más en la oferta que en pensar de dónde vendrá la demanda estén encaminándose hacia una situación en la que el exceso de capacidad en China terminará afectando a los mercados mundiales. Las medidas defensivas impuestas dificultan el normal desarrollo del comercio mundial.
