Santander | ¿Cuentos de hadas? ¿O temores de japonización? La Fed lanza el mayor guiño del año a los mercados al optar, contra todo pronóstico, por no enfrentarse al agresivo pricing del mercado. Y no solo eso, este guiño llega acompañado de una mejora de las previsiones de crecimiento, casi rozando el crecimiento tendencial en 2024. Y, en un entorno prácticamente de no destrucción de empleo, la inflación logra aterrizar mágicamente a la zona del 2% en 2024. Lo cierto es que el nuevo mensaje de Powell fue alto y claro en términos de sesgo: estamos “muy enfocados” en no cometer el error de recortar demasiado tarde, “tú quieres empezar a bajar tipos antes de que la inflación baje al 2%”. Aunque el mercado ha pasado rápidamente a descontar hasta casi 150pb de recortes (vs 75pb en los nuevos dots), creemos que los mensajes son claramente bullish para el mercado de crédito puesto que, de momento, los bancos centrales no parecen sentirse incomodados por la enorme relajación en las condiciones financieras que llegan tras el rally de noviembre y las dos primeras semanas de diciembre. El Main abre -4pb, ya por debajo de los 60pb con el Xover -17pb (335pb). Y, en contado, la SP Y SNP abren con mejoras de 4/5 y 5/10pb. Aunque es un rally que sin duda beneficia a las betas altas, si hay que buscar algún pero a esta situación a corto plazo es que, a la espera del BCE hoy, este nuevo entorno de euforia pueda finalmente facilitar/acelerar el final del PEPP.
La Fed apuesta por la cuadratura del círculo. Como apuntan nuestros economistas, con un desenlace incluso mejor que el descontado por los inversores. Cuadratura que pasa por un crecimiento en 2024 del 1,4%, muy cercano al tendencial de largo plazo (1,8%) y muy por encima de consenso (<1%), con el desempleo subiendo hasta el nivel de pleno empleo, el 4,1% (3,8% en 2023). Y se queda ahí para siempre. Entretanto, la inflación se disipa de forma mágica sin causar daños a la economía (+2,4% en la subyacente en 2024, -0,2pp de revisión y +2,2% en 2025, -0,1pp). Curioso cambio de un rumbo mucho más hawkish de Powell en su último discurso pre-black out de hace menos de dos semanas. Pero no sólo eso, también cambio de rumbo con respecto a los mensajes del último año que indicaban que el objetivo de inflación se lograría con un periodo de crecimiento por debajo de tendencia y un empleo enfriándose. Y, al tiempo que Powell durante el Q&A optaba por no cuestionar el pricing del mercado sobre un primer recorte en marzo (en una pregunta directa), además admitía que, sobre las recientes indicaciones de Waller sobre la posibilidad de recortes de tipos, empieza a ser un tema de discusión también dentro del FOMC.